Que Bruce Springteen, es el jefe, THE BOSS, es algo indiscutible, ya que en sus conciertos no hay trampa ni cartón, ni tan siquiera esos fuegos de artificio que otros exhiben.....solo con su entrega, la fuerza de su música y el fantástico sonido de la E. Street Band, hacen que sus conciertos sean únicos. Con un lleno en el Anoeta, a pesar de los impoderables de la lluvia, las grandes ausencias, de Clarence Clemmons, al que profesó un sentido homenaje, y de David Federici, no se hicieron notar.
He estado en un montón de conciertos suyos, sin embargo este fue muy especial, fueron más de tres horas sin parar...Normalmente hago fotografias o videos, pero en esta ocasión, me había olvidado la bateria, la tarjeta de memoria de la cámara de fotos, y el móvil, y claro no dudé un segundo en inmortalizar el momento, de una manera un tanto desafortunada, todo hay que decirlo...pero me quedé más contenta que unas castañuelas....!